miércoles, 4 de marzo de 2015

Tú, tú mismo y el BDSM

Estrenamos el apartado +BDSM de una manera algo filosófica, y creo que no está nada mal cuestinarse las cosas de vez en cuando.

Todos pensamos en esto alguna vez y no siempre podemos compartirlo con alguien, por ello al haber mantenido más de una conversación así, os daré la conclusión que he sacado partiendo de los distintos puntos de vista que he considerado más razonables.
Pero, eso sí, no apartéis la idea de que solo es mi opinión, y como tal, puede ser tan lógica o no, como la de cualquiera que pare a pensar y sea de una manera diferente a esta.

"¿SE NACE AM@ O SUMIS@?"
Muchos dicen que según el carácter de una persona podemos averiguar su condición en las prácticas BDSMeras. Es cierto que es una teoría totalmente lógica, pero para otros, no es del todo así.

No se puede nacer con nada estipulado "de fábrica". Lo que llevamos a cuestas al nacer son los instintos, los cuales nos harán actuar de una manera u otra durante nuestro crecimiento.
Entonces, ¿pueden nuestros instintos definirnos como am@s o sumis@s?

Sí y no.
Al pensar en que una persona puede nacer con un carácter u otro, puede decantar la dirección de nuestros actos y gustos, guiados desde un principio por los instintos. Por lo tanto, pensándolo así, podríamos decir que si una persona nace y tiene un carácter más fuerte, terminará en la dominación dentro del BDSM, y si es más dócil, siendo sometid@.

Sin embargo, si quitarle su verdad a lo anterior dicho, podemos basarnos también en el contexto social y cultural en el que esa persona se encuentre. Diríamos entonces que aunque alguien nazca con un carácter dócil, si se desarrolla en una situación que le obliga a tener un carácter mas responsable y fuerte, podría ser tanto dominante como dominado.
Pero ahi esta la cuestión, en la cual nos preguntamos si un dominante debe ser claro y conciso en su vida diaria, o un sumiso debe ser tímido y se conforme. 
Pues no. Nada nos tiene que etiquetar de una forma u otra, ya que ser timido no va ligado con ser sumiso, ni ser "mandón" con dominante. Es más, los sumisos y sumisas deben de tener las ideas muy claras y para ello necesitan de una conciencia muy fuerte. 

Y ya, l@s Swicht que tienen mucha más flexibilidad, ¿en qué nos guiariamos entonces?.


Apartando este rollo casi científico, a todo esto le incluimos que puede que las actitudes como dominantes o sumis@s, varíen dependiendo de la persona con la que estes o no.

Así es que, si mirásemos siempre a las personas y supieramos qué condición tienen, sería un mundillo muy aburrido, ya que lo divertido en esto está en experimentar.



Finalmente, la conclusión de todo esto, me llevó a pensar en que: Seas como seas, olvida el por qué, y la única pregunta que debes hacerte es si lo sientes de verdad. 
Sólo disfrútalo.
Siempre seguro, sano y consensuado.