domingo, 29 de enero de 2017

Mi amigo... Y mi novia (Parte 2)

Esa mañana me desperté temprano. No fue nada complicado levantarme de la cama, los mismos nervios ya se habían encargado de despertarme. Era el día que mi Ama iba a ponerme los cuernos con mi mejor amigo. Ella se levanto y empezó a acicalarse para él. Yo le hice el desayuno mientras se ponía apunto para impresionarlo. Desayunamos juntos y me fui a buscar a mi amigo mientras Ella terminaba de peinarse y darse los últimos toques.

Llegue al punto de encuentro donde él me esperaba. Se estaba fumando un cigarro, se notaba que también estaba nervioso. Estábamos en uno de esos sitios donde habíamos pasado gran parte de nuestra infancia juntos y aprovechó para hablarme sobre como habían cambiado las cosas, pues ahora lo estaba recogiendo para llevarlo a follar con mi novia. Estaba nervioso, si, pero dejaba claro que conocía cual era su posición sobre mi y disfrutaba haciéndomelo saber. Vimos a Naniaz venir desde el fondo de la calle, él la miraba y yo sentía que se me iba a salir el corazón solo de esperar su inminente saludo, pues verlos juntos me hizo ser completamente consciente de lo que estaba ocurriendo.

Se saludaron con dos besos, y él la piropeo por lo guapa que se había puesto. Había que hacer tiempo mientras mi casa se quedaba sola, estaba mi hermano y tardaría algo  más de una hora en irse. Empezamos por dar un paseo, por el momento, aunque las conversaciones siempre iban más destinadas a hablar entre ellos, yo seguía formando parte de ellas. Cargue con algunas cosas que traía él, que no quería estar incomodo llevándolas durante el paseo. Llegamos a un momento en el que aburridos de dar vueltas, mi amigo, me culpó tenerlos aburridos, que dijera de una vez donde podíamos ir para echar el rato, mi Ama divertida se unió, y con sus primeras sonrisas cómplices comenzaron a culparme y presionarme para que los llevará a algún sitio. Así que nervioso por la situación les dije donde había un bar al que podíamos ir. Riéndose cogieron camino abrazados por la cintura y dejándome atrás, mi amigo no desperdició la oportunidad de agarrar el culo de mi Ama, bien cogido en toda mi cara. Creo que "pequeño" puede describir muy bien como me sentía en esa situación en la que mi pareja y mi amigo me dejaban atrás cargando sus cosas mientras ellos se abrazaban y él le tocaba el culo, pero esto era lo más suave que deparaba el día de mi puesta de cuernos.

Llegamos al bar y se sentaron en una mesa, me mandaron a pedir y traer sus bebidas mientras ellos se quedaban charlando en la mesa. Serví una cola para Ella y una cerveza para él como si de un camarero me tratase y me senté con ellos a la mesa, con ellos, solo porque estaban allí, ya que al momento comenzaron las insinuaciones y los juegos de mi amigo para ponerla a tono, las caricias bajo la mesa, en un momento yo estaba de sujeta velas en una cita de mi novia, tan solo presenciando como Ella se sonrojaba y clavaba sus ojos en los de él como si allí no hubiese nadie más. Efectivamente, me estaban comiendo los celos, él lo hacía muy bien, solo estaban ellos dos, exceptuando algunos comentarios burlones por parte de mi amigo hacía mi persona. Pude hacer acto de presencia una vez más y fue para servir otra cerveza y otra cola a los que hoy eran la "parejita". Es cierto que en el bar dedicaron unos momentos a hablar conmigo, al parecer a mi amigo le parecía muy interesante que yo llevará cinturón de castidad, y por supuesto, muy gracioso ya que estaba a punto de tirarse a mi novia, cosas que sabia que yo llevaba meses sin hacer.

Al fin mi casa se quedó sola. Cuando lo supo me temblaban las manos, íbamos a mi casa y allí ya estaríamos solos para todo lo que pudiese pasar. No les hizo falta llegar a casa, me descubrí en el ascensor pegado a una pared mientras frente a mi, mi amigo le comía la boca a mi novia y sus manos la abrazaban y buscaban su entrepierna, como siempre dice Naniaz ¿Que tendrán los ascensores?. Salieron con una cachetada en el culo de mi Ama, yo les iba abriendo las puertas y dejandoles pasar siempre delante mía. Dentro de casa no esperaron para empezar a besarse, tocarse y mientras, yo aún preparaba todo a gusto de la pareja, colocar cenicero, traer agua, tirar el chicle que su amante me dejo en la mano... Se deseaban, no habían aguantado en el ascensor y en mi casa no iban a alargar las cosas con más conversaciones innecesarias. Rápidamente entre besos y magreos mi Ama que estaba sentada en el sofá con él de pie dejando su polla a la altura de su cara, podía ver el enorme bulto que había en su pantalón. Ella se lo desabrochó deseosa, sabía, y se notaba, que lo que se escondía tras esa ropa era una polla más grande que la mía. Él también la empezó a desnudar, yo estaba quieto, sentado en otra parte del sofá observando sin más. Entonces Ella me ordeno que fuese quitando la ropa de ellos del suelo, me ordenaba con gestos y no se interrumpían. Cuando vio que yo seguía vestido, tardo un poco ya que estaba más pendiente del cuerpo con el que estaba disfrutando, me ordenó desvestirme y estar en el suelo y no en el sofá, éste era solo para ellos. Mi Dueña me recordaba que mi sitio es el suelo. Cuando las braguitas de mi Ama cayeron al suelo las recogí y no pude evitar olerlas, Ella lo vio y no reprimió la risa que le producía que en esa situación oliese sus bragas para estar algo más cerca de lo que me habían prohibido. Entonces él se quito los calzoncillos y su polla, grande y ancha como debe ser una buena polla, quedó justo apuntando a la cara de mi Ama que sin pensarlo dos veces se la metió en la boca. La chupaba con ganas, jugaba con la lengua y por la cara de él estoy seguro que lo estaba haciendo perfecto como solo Ella sabe hacerlo. El empieza a hacer comentarios sobre lo bien que la mamaba, y yo no podía parar de observar a mi novia con devoción hasta que está con la mano me ordeno acercarme y cogiéndome por la cabeza me puso en su culo a hacer honor a lo que era para Ella, un "lameculos".

Recuerdo la imagen de mi Ama desnuda, sentada sobre mi amigo mientra este la magreaba y me decía lo buena que estaba y que como llevaba tanto tiempo sin follarla. Ella desnuda se reía y contoneaba sobre él. La verdad que yo no respondía a nada, solo la miraba embobado, estaba increíble, parecía que estaba más buena que nunca, no podía dejar de mirarla, sentía autentica devoción, habría hecho cualquier cosa por Ella y de hecho las tuve que hacer. Por supuesto el sentimiento de humillación era también de los más fuertes que había sentido nunca, mi amigo estaba magreando a mi novia desnuda mientras yo solo podía mirar y adorar desde  la distancia.

Mi amigo empezó a jugar con la cabeza de su polla entre los labios de la vagina de mi Ama, la cara de Ella lo decía todo y de hecho se lo dijo "métemela", en un suspiro, lo deseaba de verdad y yo sentía envidia de mi amigo. Entonces su polla se abrió paso dentro de mi novia que cambio su cara por completo dejando escapar un gemido. Era la primera que le penetraba una polla de ese tamaño y no le disgusto en absoluto. Yo seguía observando, humillado, excitado y celoso desde la distancia.


Pude acortar la distancia al poco de empezar las penetraciones, pues mi Dueña le gustaba que le lamiera el clítoris mientras él la penetraba y no perdió el tiempo en llamarme y por los pelos ponerme en mi sitio a realizar mi nueva tarea. Fue difícil hacerlo bien, pues me costaba trabajo lamer tan cerca de su polla, notaba su olor fuerte en mi nariz, sus envestidas a veces chocaban en mi cabeza y tenía que soportarlo, pues él no tendría miramientos por mi. En más de una ocasión se le salía la polla y me daba en la boca, una de las veces el glande pegó directo y pude notarlo perfectamente, me dio asco y la humillación aumentaba. Otra de esas veces que se le salía la polla me decía que la cogiera y la metiera en el coño de mi novia. Me resultaba incomodo agarrar su polla y muy humillante ayudarle a metersela a mi novia. Podía leer las miradas de deseo entre ellos y las miradas de burla y superioridad que eran para mi, en el suelo con mi polla encerrada y la suya pegada a mi cara y penetrando a mi novia. Ella gemía, le decía lo mucho que le gustaba entre respiraciones profundas y múltiples orgasmos, que disfrute como si fuesen míos. Él aguantaba muchísimo, no paraba de penetrarla en diferentes posturas. Una vez se le secó la polla y me la puso en la cara para que se la lubricase, pensé que tendría que chuparla y me asusté, pero me hizo escupirle al glande para que pudiese seguir follando. De los nervios tenía la boca seca y no me salía saliva si quiera, se rió de mí y de mi torpeza, luego me permitió beber agua para que pudiese obedecer la orden. Poco tiempo después, mi Ama necesitaba ir al servicio y siguiendo con la broma de mi boca seca, podéis imaginar donde hizo pis, no fue gran cantidad, pero fue en mi boca. Ella reía haciendo referencia a lo mucho que podía llegar a pisarme sin que yo me quejase y siempre obediente. Mi amigo miraba impresionado y divertido.


En un descanso de tanta penetración, él estaba tumbado en la cama y decidió humillarme, empezó por reírse de mí recordandome que la cama era nueva y la estaba estrenando él, me decía que se follaba muy bien y aún mejor con mi novia. Ella se unió riendo y le agarro la polla para mamarsela en toda mi cara, pues yo estaba de rodillas en el suelo y mi cara quedaba a la altura de su polla. Entonces él le quito la mano de la polla y le dijo "con esa no, con ésta", haciendo que agarrará la polla con la mano de la alianza de novios que tenemos. Lo estaban disfrutando, Ella jugaba con la lengua alrededor de su glande al mismo tiempo que me miraba a los ojos, era una mirada morbosa y divertida, se lo estaban pasando en grande a mi costa, desde luego él se reía bastante. Luego de Ella me puso de nuevo a comerle el culo, siempre su "lameculos", pero duró poco, pues mi amigo se animó y me ordeno que le comiera los huevos mientras Ella le seguía comiendo la polla. Me quedé bloqueado mirandolo y me respondió con un gesto para que me diese prisa. Fui poco a poco, no me atraía, y me costó verdaderamente acercarme a esa zona de su cuerpo. Mi Ama paro de chupársela un momento para ver como me degradaba a lamer los huevos de mi amigo. Le hacía gracia. Estaba notando el olor, cerré los ojos los chupé, note perfectamente como el lametón levanta sus testículos y escuché la risa de mi Ama que al momento volvió a comérsela. Escuchaba ahora los gemidos de mi amigo y sus expresiones de aprobación declarando que ahora si que estaba en la gloría, Ella se la chupaba y yo le comía los huevos. Desde luego había decidido humillarme y lo estaba cumpliendo con creces. Mi Ama se subió sobre su polla y empezó a botar, ahora notaba su culo botando sobre mí cabeza mientras le comía los huevo y él gemía. Pero no había terminado de humillarme y me dijo que dejara de comerle los huevos y le lamiera los pies, lo dijo con total indiferencia, centrado en los botes de mi Ama, seguramente las tetas le estarían botando delante de su cara, pero lo hacía a conciencia de que odio los pies masculinos tanto como amo los femeninos, no sé si me costó más trabajo lamer sus pies o sus huevos. Y ahí estaba yo, con el dedo del pie dentro de mi boca, mientras mi novia seguía botándole sobre su polla y haciendo bailes sensuales con las caderas como Ella sabe hacer.


Ya se acercaba el final, después de más de una hora follando mi amigo decidió correrse al fin dentro de Ella. Mi Ama se colocó a perrito y a mi me pusieron debajo de Ella con el coño en mi cara. Querían que la corrida fuese directa de su coño a mi boca, así era más cómodo para "todos". En esa postura veía perfectamente su polla entrar y salir, notaba los olores y sus huevos pasaban por encima de mi cara en cada envestida. Aprovechando la postura también le comía el coño en ciertos momentos para aumentar su placer y llego un momento que Ella tuvo un orgasmo de tal forma que se corrió y a él se le salió la polla. Y en un mismo momento me lleve un fuerte pollazo en la boca y toda la corrida de mi Ama me calló en la cara dejándome entero lleno, pues su corridas suelen ser muy abundantes. Al final cambiaron de postura y al fin mi amigo se corrió dentro de mi Dueña. Corriendo me puse bajo su coño a orden de mi Ama, que me sujetaba por el pelo para que no dejara nada, recibí todo el semen de mi amigo por mi cara y mi boca. Tragué bastante y aún así tenía la cara llena de su semen y de la corrida de mi Dueña. Cuando me dí cuenta me encontraba en la situación más humillante de mi vida, jamás me he sentido tan humillado, lo puedo asegurar. De repente me encontré arrodillado antes ellos, con la cara llena entera de la corrida de Ella y el semen de él, ellos estaban frente a mi desnudos, abrazados por la cintura, con sonrisas y miradas cómplices entre ellos. Estaban unidos por el buen sexo que acababan de tener juntos y yo seguía ahí mirándolos, sucio y encerrado en el CB. Si al principió me sentí pequeño ahora me sentía diminuto, minusculo... Una humillación que no soy capaz de describir con palabras. Mi amigo y mi Ama me miraron y el primero dijo burlón "vamos a dejarlo que se limpie que se ha portado bien ¿no?" y mi Ama me dio permiso para limpiarme.


El resto del día fuimos a almorzar juntos y luego vimos una película los tres juntos. Él no desaprovecho ningún momento para seguir metiéndose conmigo y diciéndome que tenía que darle las gracias puesto que gracias a él había conseguido puntos suficientes para hacerme una paja (Los puntos de este juego "Puntos de Castidad"). Cuando se fue y me quede a solas con mi Ama canjeé dichos puntos. Ni así me libré de la humillación, mi Ama me hizo una paja completamente mecánica, ella ya había tenido suficiente sexo por hoy y mientras lo hacía me recordaba todos los orgasmos que había tenido, todo lo que él le había hecho y me remarcaba lo patético que  era  que yo celebrase tener esa paja y correrme en mi mano cuando mi amigo se había corrido dentro de Ella. Era ridículo, si, pero entre tanta excitación contenida, el orgasmo que tuve en la mano fue brutal y me dejo completamente exhausto.


El final del día fue a solas con mi Ama y fue muy tierna conmigo, me abrazaba y me daba caricias y podía sentir que me quería y se preocupaba por mi. Yo la amaba en ese momento indescriptiblemente. No puedo describir ese sentimiento pero no quería separarme de Ella. El AfterCare fue genial y casi tan intenso como todo lo anterior, como debe ser. Esa forma tierna de tratarte la Ama hace que sientas que te quiere, que lo has hecho bien y que te cuidará siempre como su propiedad más preciada.


Después todos en casa cerramos el día por nuestro grupo de Whatsapp ya como amigos. Aunque él desde entonces siempre tiene alguna pullita para recordarme con bromas en clave que se tiró a mi novia y todo lo que hicimos, pues una vez que te ponen los cuernos, es para siempre, y yo siempre seré un cornudo.



2 comentarios:

  1. Buen relato, pero se vislumbra que es ficcion

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    1. Sentimos que creas eso. La realidad a veces parece ficción pero no por ello lo es. Esperamos que sigas disfrutando del Blog, tanto como nosotros de nuestras experiencias. Un saludo.

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